Pelota tejida a crochet, con hilos 100% algodón
No bota pelusa
Debido a la textura, también sirve como mordedor en el proceso de dentición.
Pelotas montessori pueden ser utilizadas desde los primeros meses de vida, colgándolas para que puedan alcanzarlas y golpearlas, estimulando los primeros movimientos de golpe y agarre. Además sus colores llamativos estimulan la vista. Posteriormente, fomenta el inicio del gateo, ya que al ser de fácil agarre, la guagua puede jugar con ella y lanzarla a menos de un metro de distancia, convirtiéndose en un objetivo alcanzable. Cuando el niño/a comienza a dar los primeros pasos, le permite patearla sin tambalearse, favoreciendo la repetición, ya que la pelota no recorre grandes distancias.