Eddy padece de insomnio crónico: cada vez que se acuesta, empieza a dar vueltas a los grandes problemas mundiales de los monstruos y no consigue dormir. Tiene unas ojeras tan marcadas que hasta sus padres se asustan al verle cuando los despiertan por la mañana. Por suerte, Eddy tiene a su osito de compañia ¡todo el mundo necesita un abrazo suave y cariñoso de vez en cuando! 🤗